miércoles, 8 de diciembre de 2010

La Constitución cumple 32 años, miserias y virtudes.

Efectivamente la constitución española cumple 32 años, y es que la democracia española debería empezar a madurar, ya son años. La democracia en España al igual que en el resto del mundo está experimentando un ligero (o grave) descredito, las cartas magnas de los diferentes países son ignoradas o solo tenidas en cuenta cuando se atienden a intereses de diversa índole. No obstante, la carta magna siempre se vuelve invocar como núcleo legal último de donde emana grácilmente la legitimidad del Estado y el bienestar social de la nación.
Esta fabula, es la fabula que se cuenta  al ciudadano para que siga dormido, es la cantinela barata que se escucha para justificar un “statu quo” que produce a su vez un inmovilismo de los canales de actuación y poder que mantienen al margen al conjunto de la ciudadanía, dando lugar a dicha decadencia y desconexión con la realidad social. Veamos un ejemplo:
Artículo 40 de la Constitución española. [1]
1. Los poderes públicos promoverán las condiciones favorables para el progreso social y económico y para una distribución de la renta regional y personal más equitativa, en el marco de una política de estabilidad económica. De manera especial realizarán una política orientada al pleno empleo.
2. Asimismo, los poderes públicos fomentarán una política que garantice la formación y readaptación profesionales; velarán por la seguridad e higiene en el trabajo y garantizarán el descanso necesario, mediante la limitación de la jornada laboral, las vacaciones periódicas retribuidas y la promoción de centros adecuados.
En el artículo 40 de la Constitución española se observa perfectamente como precisamente la Constitución busca ser un organigrama jurídico-legal mediante el cual el pueblo (o las gentes) de las cuales emana la soberanía, obtenga una situación laboral satisfactoria, y un status de vida digno que le permita ejercer la ciudadanía y vivir su vida en la mayor virtud posible.
Pues bien, una vez dicho esto podemos observar como a la hora de contrastar la realidad del día a día, con la ley de leyes del Estado, encontramos que los políticos no tienen la menor indulgencia, ni tan siquiera hacen la menor referencia a la hora de “saltarse a la torera” dichos artículos que cohesionan socialmente una nación. De esta manera se entiende que con un nuevo “decretazo” se cancele la ayuda de 420 € a los parados de larga duración sin mayor trascendencia para los propios políticos, y escudándolo en una necesidad económica cuyos recortes siempre van dirigidos al mismo parámetro social.
Cuando fue aprobada la Constitución Española, además de otros factores muy importantes, existía la clara intención de establecer un Estado de Bienestar moderno en España, para ello la Constitución además de recoger los valores de libertad clásicos de las revoluciones liberales, recogía también valores de cohesión social importantes que legitimaban un desarrollo social-económico lo más justo  y equilibrado posible, donde la justicia social (término olvidado en la actualidad) ocupaba un lugar destacado. El artículo 40 (y algunos más) son fruto de la introducción de dicho concepto.
En la actualidad vemos día tras día como los derechos y ventajas sociales se recortan, vemos como sectores básicos de igualdad y cohesión social (como es la educación pública, la sanidad y el sistema de pensiones público) se están comenzando a poner en cuestión, y directamente sufren considerables recortes empobreciendo significativamente su servicio a la comunidad. Existen otras posibilidades diferentes al recorte para solucionar el déficit público, no es cierto que sea la única vía, como no se cansan de repetir. ¿Por qué no se investiga las estructuras internas de las SICAVs [2]?, ¿Por qué no se establece un sistema de fiscalización trasnacional al capital financiero?, ¿Por qué no establecen medidas de recorte a los mega-sueldos de algunos políticos? ¿Por qué las entidades bancarias que en el 2008 recibieron la ayuda del Estado (y no precisamente 420€) no son obligadas a reactivar el flujo de préstamo ahora que están obteniendo beneficios [3]?   
En conclusión, y con la Constitución en la mano, se puede afirmar que los recortes sociales realizados en las últimas fechas (con la intención de “calmar” a los mercados) es un ataque sin precedentes a la soberanía del ciudadano dentro de la nación, es un ataque frontal a cohesión social del país y finalmente es un desprestigio a las gentes ya que nos tratan como ganado (al cual ordeñan) sin que nos den mayor opción política que la de valar o mugir cada 4 años. Verdaderamente la Constitución establece las bases para su reforma, y para una mayor participación ciudadana,  pero como podrán entender no es precisamente la participación ciudadana lo les interesa ahora a nuestros pastores, digo gobernantes.   
P.D: Perdón por la tardanza.         
[1]: http://noticias.juridicas.com/base_datos/Admin/constitucion.t1.html.
[2]: http://es.wikipedia.org/wiki/Sociedad_de_Inversi%C3%B3n_de_Capital_Variable
[3]: http://www.finanzas.com/cotizacion/Santander-mercadocontinuo.htm., http://www.ahorro.com/acnet/fichas/ficha_valor.acnet/isin/ES0113211835/marketCode/09/submarketId/09.html

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